La ecografía de translucencia nucal es mucho más que una imagen: es una herramienta diagnóstica crucial durante el primer trimestre del embarazo. Realizada entre las semanas 11 y 14, permite evaluar el bienestar del feto en sus etapas más tempranas, brindando información valiosa para una toma de decisiones médica oportuna.
¿Por qué es tan importante este examen?
Porque permite estimar riesgos clave en el desarrollo del bebé, como:
• Riesgo de cromosomopatías, especialmente síndrome de Down (trisomía 21), síndrome de Edwards (trisomía 18) y síndrome de Patau (trisomía 13).
• Riesgo de cardiopatías congénitas, ayudando a identificar posibles malformaciones cardíacas en fases tempranas.
• Identificación de anomalías estructurales que podrían requerir seguimiento especializado.
• Evaluación del crecimiento fetal y detección de marcadores que indiquen un embarazo de alto riesgo.
• Contribuye a una planificación médica responsable, permitiendo al equipo médico preparar estrategias de seguimiento y cuidado.
• Aporta tranquilidad emocional a los padres, al conocer información clara sobre el desarrollo de su bebé.
Además, es un procedimiento no invasivo, indoloro y seguro, tanto para la madre como para el feto.
Recuerda:
Cada semana cuenta. Cada decisión suma.
Una ecografía de translucencia nucal a tiempo puede marcar la diferencia entre la incertidumbre y la confianza.
Agenda tu cita con el Dr. Edwin Espinoza Cáceres, especialista en diagnóstico prenatal, y cuida la salud de tu bebé desde el primer latido.
Centro Médico Ginecológico y Obstétrico Prevengyn
Contáctanos hoy. Tu tranquilidad y la de tu bebé lo valen todo.
